Un problema enmascarado . El capitán de los Wallabies decidió no jugar ante los Pumas y se vuelve imprevistamente a Australia
El rugby de Australia todavía estaba digiriendo la caída en la serie como local frente a Inglaterra por 2-1 y se focalizó en lo que será el Rugby Championship, en el que debutará este sábado, en Mendoza, frente a los Pumas. Nada fuera de lo común en lo que atañe en la preparación, los ajustes finales y los deseos de salir a jugar para cambiar el estado de ánimo con una actuación convincente. Hasta que explotó la bomba interna, la que nadie esperaba en el búnker de los Wallabies.